Cada vez es más común que cuando a alguien se le ocurre empezar su negocio por internet se encuentra con que el dominio pensado ya fue registrado. Muchas veces, no queda otra alternativa que buscar un nuevo nombre para el sitio web, pero en otras oportunidades se puede negociar para conseguir el dominio.
A más de 30 años del registro del primer dominio.com, las páginas web crecen día a día y como consecuencia las posibilidades de tener un buen nombre en internet se va agotando. Fue por eso que desde hace un año la ICANN habilitó el uso de los nuevos dominios genéricos, intentando abrir más posibilidades dentro del registro de dominios.
Esta estrategia de sumar nuevas entensiones aún no logra consolidarse y los dominios .com, .net o .info siguen siendo los más buscados. Esto hace que, en varias oportunidades, cuando se busca un nombre para un sitio web el mismo se encuentre registrado por otra persona por lo que, quienes se dan por vencido rápidamente, optan por pensar una alternativa.
Pero hay otros usuarios más perseverantes, que agotan las alternativas con el dominio que desean antes de descartarlo por completo. El primer paso para esto, es saber de quién es el nombre en cuestión que se desea adquirir.
Si el dominio lleva a un sitio web, es más factible encontrar dentro de la página un apartado de contacto donde comunicarse con el administrador para hacerle saber el interés por adquirir el sitio. Si bien esto facilita ubicar al dueño, resulta difícil que alguien venda un dominio que tenga en uso, a menos de que la oferta sea por demás de tentadora.
Si el sitio web no posee página de contacto o el dominio no lleva a ninguna página, existe otra alternativa. La Corporación de Asignación de Nombres y Números de Internet (ICANN), exige a las entidades registrantes acreditadas, que al momento de registrar un dominio, publiquen la información del propietario del mismo, junto con la caducidad del mismo y otros datos relacionados en su directorio de Whois.
¿Qué es el Whois de un Dominio?
Es una base de datos en donde se puede encontrar la información de cada dominio que ha sido registrado en el mundo. De esta manera, se conoce quién es el propietario del mismo, cuándo se registró por primera vez el dominio y cuánto tiempo falta para su caducidad.
Con esos datos, se puede contactar con el propietario e intentar un acuerdo para que este transfiera el dominio.
¿Se puede ocultar la información de un dominio?
Desde la ICANN, exigen que los datos del propietario del sitio sean públicos, pero algunas entidades registrantes ofrecen un servicio de registro privado, en el que ponene los datos de la empresa en lugar del cliente que ha registrado. En esos casos, se puede intentar ponerse en contacto con la empresa y pedirles que le hagan saber al propietario del dominio el interés por adquirirlo.
Si con ninguna de estas alternativas se consigue una respuesta del propietario, se puede averiguar, mediante el Whois, la fecha de caducidad y esperar que quede libre.