Una nueva discusión se generó en torno a las extensiones de dominios en Internet y si es posible embargar judicialmente para detener la difusión de actos terroristas en países conflictivos.
Ante esta situación, la Corporación de Internet para la Asignación de Nombres y Números (ICANN), sentenció que las extensiones de dominios de los países no pueden ser blanco de embargos ya que los registros no son una propiedad, no pueden ser guardados ni poseídos por nadie, ni siquiera por el ente regulador ICANN.
La controversia se generó a partir de que abogados de víctimas estadounidenses y sus familiares, que ganaron juicios contra naciones en conflicto tales como Siria, Irán y Corea del Norte, piden bloquear los nombres de dominios de los sitios hospedados en esos países.
Las extensiones de dominio en discusión son: “.ir”, para los sitios iraníes, “.sy”, para los sirios, y “.kp” para los norcoreanos. Uno de los justificativos de la ICANN para no bloquear estas extensiones, nace desde que peligraría una estructura única y mundial de Internet.
De ser bloqueadas las extensiones de los tres países en cuestión, se destruirían todos los valores que pueden existir y podría guiar a que se borren miles de direcciones en Internet. Muchas de estas extensiones, podrían pertenecer a individuos, empresas y organizaciones solidarias.
Históricamente, las extensiones de dominios se vinculaban a los diferentes países que forman parte del globo pero en la actualidad están surgiendo las que hacen referencia a regiones o ciudades importantes como .paris.